Descripción del proyecto

 

Hace un par de semanas estuve en casa de Ana y Luis, con el objetivo de pasar unos días juntos; teníamos conversaciones pendientes, paseos y visitas obligadas, pero sobre todo achucharnos, hablar por los codos, y sentirnos cerquita…. porque viven en Chinchón (Madrid). Iba con la maleta preparada para el frío; guantes, gorro, jerseis… y sin cámara (siiii, los fotógrafos también viajamos sin cámara :D).

Iba en el Ave y me llega un wasp de Ana… «Kris quiero pedirte que me hagas una foto con mis pequeños»…¿una foto? «Por la cámara no te preocupes, te dejo la mía»… Que me pidan una sola foto, cuando yo soy de contar historias… se me hacía… raro… pero cuando te la pide una persona muy especial para mi… como si me pide una foto haciendo el pino (bueno eso no, que no me sale ;P )

A los fotógrafos nos cuesta muchísimo ponernos delante la cámara.. nos cuesta olvidar como haríamos nosotros la foto y dejar que quién nos fotografíe nos dirija o aconseje.. A la inversa, fotografiar a un fotógrafo cuesta mucho más si cabe, porque sabes que está analizando todo lo que estás haciendo, y seguro que él o ella lo haría de otro modo. Esa es la riqueza y magia de nuestro trabajo, diferente persona, diferente mirada, diferente imagen.

En este caso el reto era doble.. porque era fotografiar a dos fotógrafos, a mis queridos Ana Cruz y Luis Masyebra… casi ná… Además de cuadrar las agendas de estos dos grandes de la fotografía, con los horarios de sus pequeños, más las actividades que teníamos planeadas… Así que las fotos fueron producto de un aquí te pillo aquí te mato.. eso sí… con muchas risas…

No tuvimos ni luces mágicas de atardecer, ni preciosos entornos, pero tienen una casa muy blaquita y con una luz natural preciosa.. Y me emocioné.. me emocioné mucho al ver a mi amiga en modo mami, con esas miradas y caricias que solo nos despiertan nuestros hijos; y a mi querido Malayerba (como cariñosamente llamo a Luis) juguetón, como no, pero tierno, muy tierno a la vez.

Fueron unos días fantásticos y solo tengo palabras de agradecimiento a esta pareja tan especial.. y como me decía Luis al despedirnos «Moya, siempre me faltan un par de horas de conversación contigo» … Siempre, eso siempre.

Espero Ana que tengas «la foto» que querías.. y un poquito más.. ese poquito donde he intentado mostrar ese gran amor que existe en vuestra familia.